A pesar de su físico fuerte y poderoso, el caballo sufre tensión, contracturas, dolor, etc. Existen diferentes terapias para ayudar a que el animal se sienta bien. Lo ideal sería llevar a cabo una medicina preventiva para evitar que se desarrollen diferentes patologías, pero si el potro ya está dolorido, puedes acudir a un experto para que le someta a terapia física.
Son tratamientos de “rehabilitación física y mental que se trasforman en curativos en el caso de que sean practicados por profesionales como los veterinarios y fisioterapeutas que conozcan muy bien la estructura anatómica, fisiológica y conductual del caballo”, afirma Anahí Zlotnik, veterinaria y fisioterapeuta de caballos.
Las distintas terapias físicas son las mismas técnicas que se usan en humanos: acupresión, fricción, rolling , amasado, masaje relajante y drenaje linfático. Son movimientos en el cuerpo del caballo cuyo fin es el de estimular la propia energía curativa del caballo.
Notable mejoría en la salud del equino
Un masaje realizado por un especialista produce la liberación de endorfinas , sustancias responsables de la sensación de bienestar. “Los animales, igual que las personas, quieren sentirse bien, y cuando se sienten bien, realizan su tarea con gusto, a voluntad y el rendimiento se maximiza”, afirma Zlotnik.
Si tu caballo sufre angustia o tensión y lo trata un profesional, posiblemente consiga paliar el dolor en gran medida porque el masaje practicado con conciencia “relaja las zonas de tensión o contracturas y disminuye el dolor “, añade. También influye positivamente en el sistema nervioso, mejorando la circulación : al existir mayor nutrición y oxigenación, disminuye la inflamación y, por lo tanto, el dolor.
Asimismo, un masaje es muy fructífero porque por medio del mismo se identifica donde está la tensión. Además, puede ayudar a prevenir daños al reducirse tensión muscular antes de que se produzca la lesión. “Un animal masajeado toma conciencia de su cuerpo, aprende a relajarse en situaciones de presión, aprende a usar sus miembros con mayor inteligencia, de la misma manera que un atleta bien entrenado tiene conciencia de su organismo”, pone como ejemplo la experta.
¿Cuando es beneficioso el masaje?
Por su bienestar todos los caballos que se dedican a una disciplina atlética necesitarían un masaje antes de desarrollar su destreza. Según la actividad que realicen habrá unas zonas de su cuerpo que se tensen más que otras o que sufran desequilibrios musculares llegando a convertirse en lesiones agudas. “Por ser una práctica preventiva el animal corre menos riesgos de lastimarse”, tal y como asegura la fisioterapeuta equino.
Salto, doma , endurance , raid o carreras de caballos son algunas de las modalidades que demandan fuerza y brío. El potro desgasta gran energía en un escaso periodo de tiempo. Anahí asegura que “un caballo consciente de su cuerpo está en mejores condiciones para usarlo y no lastimarse durante la actividad”.
Pero los masajes no son sólo para los equinos que se someten a ciertas especialidades, sino que también son beneficiosos para todos, pues el fin de la terapia es el de “estimular la propia energía curativa para que el caballo encuentre su propio balance”, resalta la especialista.
¿En qué beneficia el masaje al caballo?
Son tan numerosos los beneficios que proporciona la fricción sobre una zona del animal que sería difícil nombrarlos todos. La veterinaria Zlotnik enumera los siguientes:
- Disminuye el dolor.
- Produce relajación.
- Libera la tensión muscular.
- Estimula la circulación por estímulo o sedación del sistema nervioso.
- Mejora la digestión.
- Mejora la salud general.
- Produce confianza.
- Amplía el rango del movimiento articular .
- Disminuye la posibilidad de que tenga contracturas o espasmos musculares.
- Disminuye los dolores en el lomo.
- Muy útil para tratar caballos que corcovean.
- Disminuye la timidez .
- Aumenta un rendimiento que estaba disminuido.
- Disminuye los problemas de resistencia a ser limpiados o ensillados.
- Disminuye la desgana o irritabilidad.
- Relaja el estrés por dolor que producen algunas enfermedades.
Además, la entendida asegura que “de algún modo los caballos tratados se convierten en animales más inteligentes, trabajan más relajados, están más dispuestos y son más alegres”.
Comunicación entre terapeuta y animal
Fundamentalmente, los masajes son un modo de comunicación entre el experto y el caballo pero, además la veterinaria explica que es un medio de diagnóstico y un medio de evolución en el tratamiento de sus pacientes. “A medida que se da esta comunicación, el caballo confía , envía señales, lo voy conociendo y tengo más herramientas para tratarlo”, afirma.
“Como veterinaria intento conocer el sistema de comunicación del animal . Por lo tanto, cuando lo atiendo estoy atenta a sus signos y señales”, explica. Los caballos son muy intensos en sus emociones. “Cuando encuentran que pueden ser escuchados, este hecho por sí mismo mejora todo su estado: físico , mental y anímico “.
Zlotnik nos explica como se relaja el paciente: “a veces algunos caballos se calman cuando les hablo. Otras veces, se relajan mejor cuando hay silencio. En general prefieren el silencio “, asegura. También agregó que el contacto físico es muy importante y que una caricia los calma, pero que éstas, exentas de técnica, no tienen el mismo efecto que el trabajo manual con el método.
La fisioterapeuta comunicó a Mascotasyhogar.com que normalmente ella se comunica con sus pacientes en su propio lenguaje . “Mis gestos, miradas, los movimientos de mi cuerpo imitan los movimientos de los caballos, puedo lograr una comunicación efectiva. El caballo se siente más seguro cuando logro esta comunicación. Es la misma que tendría él en su grupo social “.
Estimulo táctil
El trabajo no es fácil y el masajista tiene que ser sensible con sus manos y sobre todo ser muy paciente. Lo primero que tiene que lograr es la confianza del animal ya que, si éste colabora, el éxito de la terapia está asegurado.
Cuando el masaje se usa como rehabilitación y no como relajación, el terapeuta debe comenzar por un sitio lejano a la parte en la que se encuentre la lesión. La veterinaria afirma que “hay que evitar provocar que el caballo contraiga sus músculos de forma defensiva al sufrir un fuerte dolor. Esta reacción sucede si directamente se comienza a masajear el foco de la contusión”.
Los masajes relajan a todos los animales, pero es necesario que para ello se sientan a gusto. Si el caballo se encuentra en una situación de confianza, se entregará a las manos del terapeuta y éste podrá trabajar con el animal y mejorar su salud. Por el contrario, si el caballo está incómodo o asustado, se pondrá nervioso y no colaborará con el experto, bien porque le duela o bien porque recuerde que en una ocasión sufrió dolor.