Las cacatúas son comunes como mascota, aunque no muy generalizado, a veces por desconocimiento o por una mala información se opta por un loro, un guacamayo… Se trata de aves extremadamente inteligentes y activas además de muy afectivas.
Cuando uno se plantea adquirir una cacatúa como mascota debe ser muy prudente y que sea una decisión muy meditada. No es una mascota como un perro o un gato. Hay que pensar que las cacatúas, como los loros son animales muy dependientes de su dueño lo que nos puede complicar nuestros hábitos y costumbres. Necesitan nuestra atención y no son animales que podamos llevarnos, normalmente, con nosotros de vacaciones. Existen centros de guardería donde pueden permanecer mientras estamos fuera, eso sí, pero hay que contar con ello.
Por otro lado, su educación debe ser estricta y cuidadosa y debemos ser constantes en su adiestramiento para que nuestro animal no se convierta en un problema. Si desde el primer momento marcamos unas pautas y unos límites todo será mucho más fácil, no podemos dejar que con sus carantoñas se apoderen de nosotros y conviertan nuestra vida en un infierno e incluso la suya propia.
Las cacatúas son muy afectivas y cariñosas, les encantaría que estuviésemos todo el día sobándolas, jugando con ellas y haciéndoles mimos. Por eso, por mucho que nos apetezca, debemos dosificar las horas de juego, muy importante el interactuar con ella, y no dejar que sea ella la que establezca los horarios. Si se vuelve caprichosas o maleducadas pasaremos a hablar de problemas como los gritos descontrolados e incluso ellas mismas se hacen daño arrancándose las plumas, lo que se llama picaje. Son muy sensibles, por su inteligencia, a padecer problemas emocionales, psicológicos que les llevan a esos comportamientos no deseados.
Por todo esto hay que ser más cuidadoso al elegir un loro o una cacatúa como mascota que cualquier otro animal, pero cuando todo se hace correctamente nos cambian realmente la vida para bien, nos harán reír aún cuando no tengamos ganas, llamarán nuestra atención con sus jugueteos… Disfrutaremos cuando imiten nuestras palabras, sonidos, el timbre del teléfono o el ladrido del perro. Repito que son muy inteligentes y nunca dejan de sorprendernos.
También podemos tener ayuda en su adiestramiento, hay centros como Guarouba Consultores expertos en flora y fauna que nos pueden ayudar a adiestrar a nuestra mascota. Le enseñan a obedecer, a subirse a la mano o al brazo… En fin, que nos pueden ayudar si esa parte nos parece más difícil.
Debemos estar preparados también para el tema veterinarios, tenemos que tener uno a mano experto en exóticos y saber que las analíticas y las visitas nos van a costar más de lo que pensamos. Teniendo todo es t o en cuenta, elegir una cacatúa es una buena opción, pero la habremos elegido sabiendo a lo que nos vamos a enfrentar, sin sorpresas. Haciéndolo así nos podemos encontrar con el animal ideal como mascota. En mi opinión, cuando dicen que son animales para jubilados, creo que es extremista. Todos los dueños de cacatúa que conozco tienen su horario de trabajo y no supone ningún problema para el animal si se le ha acostumbrado a estar sola durante esas horas. A veces complicamos las cosas más de lo necesario o nos creemos los mitos y leyendas que nos cuentan sobre ellas. No debe ser así. Una cacatúa bien educada es un caramelo que nos dará mucho cariño porque saben hacerlo, saben cómo hacernos felices pero debemos interactuar con ella, participar en sus juegos y hacerla un miembro más de la familia. Si alguien queda con dudas sobre la tenencia de una cacatúa que no dude en preguntarme o hacerme llegar sus dudas, les aconsejaré en lo que me sea posible como he hecho con otras personas que se han puesto en contacto conmigo. Añado este último párrafo de
Si se decide adquirir una cacatúa como mascota es importante que se trate de un ejemplar joven y que durante los primeros meses se le de un entrenamiento exhaustivo, de manera que aprenda claramente cual es su posición dentro de la familia, lo que puede y lo que no puede hacer. Si este entrenamiento se hace bien, y el ave asume su posición en la jerarquía, pueden ser mascotas perfectas, quizás las mejores, pero de no ser así, los problemas pueden ser terribles. A la hora de hablar, las cacatúas no son fabulosas, pero pueden hablar lo suficiente para contentar a la mayoría de los dueños