El diario de un gato y un perro

by

Diario de un gato

Primer dia de vida en cautividad. Hace unas horas, escuché a un humano decir “ése”. Me percaté de lo que sucedía pero aún no tengo músculos lo suficientemente fuertes como para escapar, apenas puedo caminar sin que me fallen las patas, noté el calor de unas manos enormes cuando fui tomado por sorpresa. En pocos segundos me encontré metido dentro de una caja.

El viaje ha sido más largo de lo que pensaba y no se a donde me han llevado mis captores, no se cuanta distancia hemos recorrido pero en el camino no me han dejado salir y he tenido que hacer mis necesidades en la caja.

Día dos. No sé por qué tuve la mala suerte de ser elegido para terminar en esta casa. Era feliz con mi madre y jugando con mis hermanos entre una maraña de papeles y algodones hasta que llegaron mis ahora captores. No es fácil llevarse bien con todos los hermanos, sobretodo cuando tu compañero de juegos de lucha es tu hermano mayor y te saca más de 20 minutos de vida. Pero me encontraba mejor alli, en familia, que con estos humanos.

La alimentación que recibo ahora es extraña, no puedo obtenerla de la barriga de mi madre, aqui no hay ese tipo de leche, en cambio, me dan un tipo de leche extraña que me hace hinchar la tripa y no está del todo mal, agarro con fuerza el tubo de plástico y succiono la parte blandita para que salga la leche, muevo las orejitas a gran velocidad y trato de consumir todo el alimento, quién sabe si en muchas horas no habrá más. Es divertido eliminar liquidos en los lugares más recónditos de esta casa. Mis captores buscan desesperadamente el sitio que elegí ahora. Estoy escondido, hay poca luz aquí. Tengo ganas de hacer pipí. Creo que este es un buen lugar ¡Aahhhh, que alivio!

Día diez. Parece que los humanos ya no quieren que haga pis en el suelo de la casa, me han llevado a una caja llena de arena. Me toman por las patas y me hacen rascar y mover la arena durante un rato. ¿Qué pretenden? He buscado qué hay debajo de toda esa arena pero no encuentro nada dentro, crei que me indicaban que habia algo que buscar. ¿Para qué será la arena? No encuentro ningún regalo dentro.

Día once. Esta arena será perfecta para hacer mis necesidades, no me encuentro demasiado cómodo en el suelo duro y tampoco me gusta la idea de ir dejando en mal lugar nuestra fama de limpieza y pulcritud. No se como no me la habian traido antes.

Día quince. Hemos salido de viaje y algo no me huele bien. Y no, no me refiero a la caja de arena. Aqui hay gato encerrado, nunca mejor dicho. No he llegado a ver por donde me llevaban, dentro de esa caja iba muy oscuro, era como un bolso enorme. Rogué con maullidos que me sacaran antes de que ocurriera un accidente debido al mareo, pero no se me permitió salir. El coche se detuvo unos minutos, después, entramos en una sala donde varios humanos permanecian sentados, al parecer no soy el único animal del mundo que vive en cautividad, he visto a otros compañeros, a algunos de mi especie y a otros animales. Me pasaron a una sala diferente, tras pasar la puerta, me sacaron y fui colocado en una mesa de acero inoxidable. Un sujeto vestido con una larga bata me dio un pinchazo terrible. No me dieron ninguna explicación y minutos después me regresaron a casa. Esto ha sido un ataque a traición y esto no va a quedar asi.

Día treinta. Me han cambiado la alimentación, ahora me sirven unas galletas marrones, duras y diminutas. Afortunadamente de vez en cuando las hacen más blanditas mojándolas en agua.

Día 35. Mis dias comienzan a ser monótonos, me han dejado un lugar con un pequeño sitio mullido para dormir, está blandito y cubierto, es cómodo estar alli, tengo que reposar muchas horas para crecer y durante el dia no es buen momento de entrenar mis habilidades felinas. Un buen depredador busca la acción cuando llega la noche y yo soy un depredador. Puedo resumir estos ultimos dias como dormir, comer, investigar.

Día 43. Mis captores siguen tratando de llamar mi atención arrojando diversos objetos para que juegue con ellos, me despiertan por la tarde y me hacen salir a lugares de la casa para entretenerse. Me molesta que coman jugosos trozos de carne mientras soy forzado a comer unas diminutas cosas secas, pero los juegos me vienen bien para practicar la caza. Lo único que me mantiene alerta es la esperanza de escapar y la satisfacción de arruinar la mayor cantidad de mobiliario posible antes de emprender la huida y mientras mis garras estén a punto no dejaré títere con cabeza.

Día 50. Voy demostrando de lo que soy capaz, en mis juegos pongo a prueba mis habilidades felinas y mi condición de depredador sigiloso y certero. He eliminado varias plantas, mordido las hojas y los tallos. He arañado unos pijamas y tras descansar un rato, me han atrapado y me han agarrado del cogote mientras me gritaban algo, no se muy bien que decian pero parece que no les ha gustado ver lo que ha quedado de las plantas y los pantalones de pijama.

Día 65. He logrado herir a varios de mis captores, espero que esto les sirva de lección. Uno de ellos se acerco a mi mientras descansaba y puso su cara contra mi hocico, moví la cola insistentemente mostrando que eso no me hacia ninguna gracia, pero el siguio desafiandome, asi que le arañe y le mordi en la nariz. Eso le enseñará.

Día 70. Pasé todo el día dormido, ahorrando mis energías para subirme a su cama y despertarlos con maullidos y mordidas y obligarlos a que me dieran algo de comer. Fui expulsado del cuarto. En la cocina también hay juegos divertidos, cuando no puedo acceder al bebedero me subo a la mesa y tumbo alguno de los vasos con agua para poder beber.

Día 86. La crueldad de mis captores no tiene límites. Hoy me colocaron un artefacto alrededor del cuello, con una pequeña pieza de metal que lleva algo grabado. Hice todo lo que estaba en mis garras por deshacerme de él, pero fue inútil. Es algo extraño, si me muevo rapidamente esta cosa metalica hace ruido, como una musiquita extraña que no se muy bien para que sirve pero desde luego destruye mi estrategia de caza, por muy sigiloso que sea, al salir corriendo hacia el objetivo, comienza a sonar este artefacto. Adiós al factor sorpresa.

Dia 183 en cautividad…

Mis captores continuan trayendome cosas y poniendomelas en la cara, no se si pretenden que yo juegue con ellos. Esta gente come carne fresca, mientras que los otros rehenes y a mi nos dan unas pelotitas secas horribles de comer. Ese olor…es carne… y desde luego tiene pinta de saber aún mejor que esas latitas que son más sabrosas que el alimento seco.

No me lo como todo a la vez y hago saber mi descontento que lo poco que me sirven no me gusta…pero tengo que comer para mantener mis fuerzas y escapar algun dia. Prefiero comer antes de comenzar mi larga siesta de la mañana y después tomar unos bocados durante el dia. No estoy interesado en utilizar más el bebedero mientras pueda acceder a los palos metálicos que sueltan agua cuando los humanos mueven una palanca, creo que son “grifos”, simplemente me acerco a ellos y comienzo a maullar, asi estos humanos comprenden que quiero refrescarme y calmar la sed.

Una vez más trato de que me odien vomitando en el salon…La humana lo limpia y me pregunta si me pasa algo. Yo esperaba que asi me diesen otro lugar donde moverme, saltar, correr, cazar!

Hoy decapité a un insecto que vi en la terraza y lo deposité a los pies de mi carcelera…pensé que esto le daría miedo…al fin y al cabo es una muestra de lo que soy capaz de hacer con otros series vivos, mis presas son variadas en la cadena alimentaria…pero no, simplemente hicieron ruidos con la boca y hasta los oi decir que soy muy buen cazador!….seran tontos!!??

Al parecer hoy los carceleros planearon una reunión porque llegaron otros complices…lo se porque me pusieron en confinamiento solitario….de todas formas los escuchaba hablando y los senti comiendo…estuvieron diciendo que me habian dejado solo por culpa de que uno de los complices tiene alergias a los gatos. Tengo que mantenerme alerta de esta nueva gente ya que no los conozco bien, nada me asegura que se comportarán como los habitantes de esta casa. ¿Alergias? no se que será eso pero lo averiguare, por si lo puedo usar a mi favor!

Hoy trate de asesinar a uno de mis atormentadores..me meti por entre sus piernas mientras caminaba…casi, casi lo consigo, pero no tuve mucha suerte. Ahora aprendi que lo debo de hacer de nuevo, pero esta vez esperare a que esten bajando la escalera y llegaré sigilosamente desde atrás para morder sus piernas.

Estoy convencido que los otros rehenes son tontos o informantes. El perro recibe privilegios, lo dejan salir regularmente, y es tan tonto que regresa…obviamente es estúpido, aunque parece que le gusta eso de ir controlado con una correa, yo prefiero moverme sin eso al cuello.

Las aves enjauladas que están en el exterior deben ser informantes de los humanos…Los observo comunicarse con los captores casi todas las mañanas…estoy seguro que reportan información sobre los planes de evasión. Los captores deben de leer mi pensamiento porque arreglaron de meter al pajaro en una celda elevada…jejeje se creen que está a salvo…pero es sólo por ahora. Puedo dar grandes saltos e introducir mi pata entre los barrotes hasta llegar al nido, eso no les va a salvar.

Mañana empieza un nuevo dia, mejor descanso un poco ahora, asi tengo fuerzas por si mañana es el dia de escapar!

 

 

Diario de un perro

8:00 am – Pienso! mi comida favorita!
9:30 am – Un paseo en coche! Mi actividad favorita!
9:40 am – Caminando por el parque! Mi actividad favorita!
10:30 am – Mi amo me acaricia y me peina! Mi actividad favorita!!
12:00 pm – Más pienso! mi comida favorita!
13:00 pm – A jugar al patio! Mi actividad favorita!
15:00 pm – Estoy tratando de agarrar mi cola! jajaja que divertido! Mi actividad favorita!!
17:00 pm – Piensoooo! Mi comida favorita!
19:00 pm – Jugar con la pelota! Mi actividad favorita!!
20:00 pm – Wow! Miré la televisión con los humanos! Mi actividad favorita!!
23:00 pm – A dormir en la cama de mis amos! Mi actividad favorita!!

Leave a Comment